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Una mirada a los espectros: Interseccionalidad entre autismo y diversidad de género
Eddiel Hernández-López, B.S.
Es estudiante doctoral de Ph.D. en Psicología Clínica de Ponce Health Sciences University. Colabora como investigador de proyectos relacionados a disparidades de salud en minorías sexuales en el Queer Health Biopsychosocial Laboratory. Actualmente, funge como asistente de investigación en proyectos relacionados al riesgo de síndrome metabólico en minorías sexuales, asociación de múltiples inteligencias con el estrés crónico en esta población, así como el desarrollo de instrumentos para la reducción de inequidades de salud en la comunidad LGBTQ+. Además, trabaja en el desarrollo de una escala de síntomas físicos asociados a la salida del closet y funge como interno y consultor LGBTQ+ en la organización Young Survival Coalition. Igualmente, colabora como asistente de investigación en el tema del estigma hacia la salud mental y el suicidio en la juventud latina.
Email: edhernandez21@stu.psm.edu
Aisys Laureano-Reyes, M.A., M.S.
Con dos maestrías, una en Neurociencia Educativa y otra en Psicología Clínica, se centra en el estudio de trastornos del neurodesarrollo. Cuenta con experiencia clínica con la población de autismo y TDAH. Su enfoque de investigación está dirigido en estudiar los déficits cognitivos del TDAH, buscando mejorar la comprensión y las intervenciones para las personas que lo padecen. De igual forma, se interesa en explorar los puntos de encuentro entre la neurodiversidad y la género-diversidad. Actualmente cursa su grado doctoral en el programa de Ph.D. en Psicología Clínica de Ponce Health Sciences University.
Email: alaureano21@stu.psm.edu
El estudio de las interseccionalidades dentro de la población de personas género-diversas es crucial para promover la equidad, justicia social, inclusión y acceso a servicios que promuevan bienestar biopsicosocial. La literatura emergente sobre las interseccionalidades de personas género-diversas ha destacado la necesidad de visibilización de personas neurodiversas dentro de esta población. A pesar de que en Puerto Rico hay muy pocas investigaciones sobre esta interseccionalidad, la literatura sugiere que en otros contextos culturales se ha observado una alta prevalencia de autismo en personas género-diversas (Glidden et al., 2016; Strang et al., 2018). Cabe destacar que, aunque existe esta prevalencia, se discute poco sobre el tema. A su vez, hay escasez de servicios atemperados a las necesidades de esta población.
El autismo o Trastorno del Espectro Autista (TEA) es un desorden del neurodesarrollo que se caracteriza por dificultades marcadas en interacciones sociales, comunicación verbal y no verbal, junto con patrones restrictivos y repetitivos en intereses y conductas (American Psychological Association, 2023). En general, se ha encontrado que menores que se identifican con géneros diversos tienden a presentar mayores rasgos de autismo, al compararles con la población de menores cisgénero. Se estima que la prevalencia de un diagnóstico de TEA en la población de personas género-diversas es 11 veces mayor que la prevalencia estimada de 1% en la población general (Kallitsounaki & Williams, 2023). Partiendo de esto, esta revisión de literatura busca explorar brevemente y describir los desafíos y las necesidades específicas de esta interseccionalidad, así como identificar mejores prácticas y enfoques para proporcionarles un apoyo integral y de respeto. Por tanto, este artículo pretende exponer implicaciones y relevancia para entender y atender la interseccionalidad entre diversidad de género y el TEA en la práctica de la psicología.
A modo aclaratorio es importante comprender en qué consiste la diversidad de género. De acuerdo con la Asociación Americana de Psicología (APA, por sus siglas en inglés), el género es descrito como un constructo social que aborda los roles, comportamientos, actividades y atributos asociados con el género masculino, el femenino, el no binario, y el no conforme, entre otros (APA, 2023). El género aborda aspectos psicológicos, conductuales sociales y culturales. En la literatura, se ha descrito el género como un espectro, fluido y dinámico. Esto significa que las formas en que las personas se identifican y expresan su género pueden variar y no necesariamente encajan con las categorías de sexo tradicionales de hombre y mujer. En este sentido, la diversidad de género reconoce que hay muchas maneras legítimas de experimentar el género, y que algunas personas pueden identificarse con un género que no coincide con su sexo biológico asignado al nacer. Estas personas se conocen como género-diversas (APA, 2023).
Es necesario señalar que, al hablar de personas género-diversas, no se debe asumir que estas personas experimentan disforia de género. Cuando se discute sobre diversidad de género, es importante mencionar que la disforia de género se refiere al malestar causado por la incongruencia entre la identidad de género de una persona y el sexo asignado al nacer y/o las características sexuales. La APA describe la disforia de género como una angustia clínicamente significativa relacionada con este sentido de incongruencias (APA, 2023). Además, es fundamental reconocer que las personas género-diversas tienden a experimentar altos niveles de prejuicio, estigma, victimización y discriminación, por lo cual se considera una población vulnerabilizada.
Por otra parte, la investigación existente sobre el desarrollo de la identidad de género en personas con TEA es limitada y, en ocasiones, contradictoria, lo que dificulta identificar cuándo surge la identidad de género en personas con TEA. Algunos estudios sugieren una posible correlación entre el desarrollo de la identidad de género y habilidades sociales, comunicativas y edad mental en personas neurotípicas, áreas que se pueden ver afectadas en algunas personas con TEA (van Schalkwyk et al., 2015). Por consiguiente, algunas personas autoras plantean la hipótesis que el desarrollo de la identidad de género en personas con TEA puede ocurrir más tarde que en personas neurotípicas. Estos hallazgos aún no han sido validados ni generalizados para la población con TEA (Hillier et al., 2019). No obstante, esto sugiere que podría ser beneficioso para familiares y para quienes proveen servicios de salud, prestar atención al desarrollo de la identidad de género en personas con TEA desde una edad temprana. Esto también podría facilitar nuestro papel clínico en los procesos terapéuticos como personas aliadas para ayudar a la persona a explorar su propia identidad, en lugar de ser una barrera para acceder a las intervenciones adecuadas (van Schalkwyk et al., 2015).
Al abordar la complejidad de esta interseccionalidad, es esencial tener en cuenta que los síntomas de TEA que experimentan las mujeres -asignadas al nacer- pueden resultar más difíciles de diagnosticar. Se ha observado que, para recibir un diagnóstico, las mujeres suelen tener que presentar síntomas más pronunciados en comparación con los hombres, tales como problemas conductuales severos y/o discapacidad intelectual. Esto conlleva a que las mujeres a menudo reciban diagnósticos incorrectos, tardíos o, en ocasiones, no reciban ningún diagnóstico en absoluto (Kreiser & White, 2014; Schuck et al., 2019; Tillmann et al., 2018). Este patrón también se extiende a los hombres transgénero, por ejemplo, las personas de experiencia transmasculina podrían recibir durante su desarrollo una crianza y un trato asociados a los roles de mujeres cisgénero, lo cual pudiera relacionarse con el camuflaje o “masking” de síntomas que se puede observar en el TEA. A su vez, se puede dar un “passing” o un tipo de doble “masking” relacionado a su identidad de género y la tendencia a presentarse de una forma neurotípica (Coleman et al., 2020; Moore, 2022). Por consiguiente, al considerar las demandas sociales y las dificultades en cuanto a reciprocidad socioemocional que enfrentan las personas dentro de esta interseccionalidad, el doble camuflaje puede representar una barrera hacia el acceso a tratamientos efectivos y recibir el apoyo necesario.
Es importante destacar el impacto del estigma hacia personas dentro de esta interseccionalidad. A pesar de que las personas género-diversas y las personas con TEA están sujetas a niveles más altos de estigma y prejuicio, esta situación se agrava para las personas género-diversas con TEA, ya que se ha encontrado que experimentan bajos niveles de apoyo parental al revelar preocupaciones sobre su identidad de género, presentando más angustia si desean transicionar socialmente. Además, hay personas dentro de esta interseccionalidad que reportan sentirse desacreditadas e invalidadas por quienes les proveen servicios de salud, según expresado por una persona trans con TEA: “... as the doc sees your ASD expression, and hears you say ‘I am Trans’, and draws the conclusion you are a very confused gay person who got confused by your ASD” (Shapira & Granek, 2019, p. 505). Se ha observado que los comportamientos e intereses género-diversos en la niñez y la adolescencia con TEA pueden ser pasados por alto o descartados como parte de los criterios de TEA relacionados con intereses restringidos y repetitivos por parientes y quienes proveen servicios. Es relevante mencionar que los consensos clínicos indican que, en la mayoría de los casos, las identidades y comportamientos género-diversos no están asociados con el TEA, sino que coocurren como parte de la identidad de las personas (Mahfouda et al., 2019).
La incomodidad o falta de conciencia en torno al TEA y la disforia de género puede llevar al personal clínico a suposiciones e intervenciones que pueden repercutir de manera negativa en el bienestar e integridad de las personas género-diversas con TEA. A su vez, la transfobia y el estigma hacia la neurodiversidad podrían afectar el acceso, adherencia y la efectividad de los servicios. Para contrarrestar esto, el personal clínico debe adoptar una visión interseccional de las identidades de género de sus pacientes con TEA con el propósito de reducir el estigma y reconocer las necesidades de la persona en su totalidad. Se debe facilitar el acceso a servicios géneroafirmativos y al contenido adaptado a las necesidades específicas de personas con TEA, ya que es crucial para el cuidado y tratamiento dentro de esta interseccionalidad. Profesionales de la salud deben llevar a cabo prácticas éticas y responsables y esto implica afirmar, validar y respaldar la diversidad en todos sus aspectos y espectros (e.g., neurodiversidad y diversidad de género), así como reconocer la autonomía y dignidad de las personas que acuden en búsqueda de servicios.
Referencias:
American Psychological Association. (2023a). Autism spectrum disorder. En APA Dictionary of Psychology. American Psychological Association. https://dictionary.apa.org/autism- spectrum-disorder
American Psychological Association. (2023b). Gender. En APA Dictionary of Psychology. American Psychological Association. https://dictionary.apa.org/gender
American Psychological Association. (2023c). Gender dysphoria. En APA Dictionary of Psychology. American Psychological Association. https://dictionary.apa.org/gender-dysphoria
Coleman-Smith, R. S., Smith, R., Milne, E., & Thompson, A. R. (2020). “Conflict versus congruence”: A qualitative study exploring the experience of gender dysphoria for adults with autism spectrum disorder. Journal of Autism and Developmental Disorders, 50(8), 2643–2657. https://doi.org/10.1007/s10803-019-04296-3
Glidden, D., Bouman, W. P., Jones, B. A., & Arcelus, J. (2016). Gender dysphoria and autism spectrum disorder: A systematic review of the literature. Sexual Medicine Reviews, 4(1), 3–14. https://doi.org/10.1016/j.sxmr.2015.10.003
Hillier, A., Gallop, N., Mendes, E., Tellez, D., Buckingham, A., Nizami, A., & O'Toole, D. (2019). LGBTQ+ and autism spectrum disorder: Experiences and challenges. International Journal of Transgender Health, 21(1), 98-110. https://doi.org/10.1080/15532739.2019.1594484
Kallitsounaki, A., & Williams, D. M. (2023). Autism spectrum disorder and gender dysphoria/incongruence. A systematic literature review and meta-analysis. Journal of Autism and Developmental Disorders, 53(8), 3103–3117. https://doi.org/10.1007/s10803-022-05517-y
Kreiser, N. L., & White, S. W. (2014). ASD in females: Are we overstating the gender difference in diagnosis? Clinical Child and Family Psychology Review, 17(1), 67–84. https://doi.org/10.1007/s10567-013-0148-9
Mahfouda, S., Panos, C., Whitehouse, A. J. O., Thomas, C. S., Maybery, M., Strauss, P., Zepf, F. D., O'Donovan, A., van Hall, H. W., Saunders, L. A., Moore, J. K., & Lin, A. (2019). Mental health correlates of autism spectrum disorder in gender diverse young people: Evidence from a specialized child and adolescent gender clinic in Australia. Journal of Clinical Medicine, 8(10), 1503. https://doi.org/10.3390/jcm8101503
Moore, I., Morgan, G., Welham, A., & Russell, G. (2022). The intersection of autism and gender in the negotiation of identity: A systematic review and metasynthesis. Feminism & Psychology, 32(4), 421-442. https://doi.org/10.1177/09593535221074806
Shapira, S., & Granek, L. (2019). Negotiating psychiatric cisgenderism-ableism in the transgender-autism nexus. Feminism & Psychology, 29(4), 494-513.
Schuck, R. K., Flores, R. E., & Fung, L. K. (2019). Brief report: sex/gender differences in symptomology and camouflaging in adults with autism spectrum disorder. Journal of Autism and Developmental Disorders, 49(6), 2597–2604. https://doi.org/10.1007/s10803-019-03998-y
Strang, J. F., Meagher, H., Kenworthy, L., de Vries, A. L. C., Menvielle, E., Leibowitz, S., Janssen, A., Cohen-Kettenis, P., Shumer, D. E., Edwards-Leeper, L., Pleak, R. R., Spack, N., Karasic, D. H., Schreier, H., Balleur, A., Tishelman, A., Ehrensaft, D., Rodnan, L., Kuschner, E. S., Mandel, F., … Anthony, L. G. (2018). Initial clinical guidelines for co-occurring autism spectrum disorder and gender dysphoria or incongruence in adolescents. Journal of Clinical Child and Adolescent Psychology, 47(1), 105-113. https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/15374416.2016.1228462
Tillmann, J., Ashwood, K., Absoud, M., Bölte, S., Bonnet-Brilhault, F., Buitelaar, J. K., Calderoni, S., Calvo, R., Canal-Bedia, R., Canitano, R., De Bildt, A., Gomot, M., Hoekstra, P. J., Kaale, A., McConachie, H., Murphy, D. G., Narzisi, A., Oosterling, I., Pejovic-Milovancevic, M., Persico, A. M., … Charman, T. (2018). Evaluating sex and age differences in ADI-R and ADOS scores in a large European multi-site sample of individuals with autism spectrum disorder. Journal of Autism and Developmental Disorders, 48(7), 2490–2505. https://doi.org/10.1007/s10803-018-3510-4
Van Schalkwyk, G. I., Klingensmith, K., & Volkmar, F. R. (2015). Gender identity and autism spectrum disorders. The Yale Journal of Biology and Medicine, 88(1), 81-83